El incidente del 30 de abril, protagonizado por el presidente de la junta auxiliar de San Pedro Zacachimalpa, Juan Carlos Jiménez, fue un punto de inflexión en la contienda electoral. Al bloquear violentamente un recorrido de Figueroa, Jiménez desató una ola de indignación que favoreció al candidato de Morena.
El video del incidente se viralizó en las redes sociales, generando un fuerte respaldo a Figueroa. Esto, sumado a su constante trabajo de campaña en territorio, ha catapultado su imagen mediática y consolidado su posición en las encuestas. Actualmente, mantiene una ventaja de dos dígitos sobre su rival, Karina Romero.
Además, el incidente adquiere aún más relevancia al descubrirse la vinculación política de Juan Carlos Jiménez. Se reveló que había sido nombrado como promotor en las juntas auxiliares para la campaña de Mario Riestra, candidato de otra fuerza política.
Este hecho generó un repudio generalizado hacia su accionar y puso en entredicho la supuesta neutralidad de ciertos actores políticos locales. La ciudadanía observó con atención cómo las acciones de Jiménez parecían estar orquestadas desde instancias superiores, en un intento por desestabilizar la campaña de José Luis Figueroa.
A pesar de estos obstáculos, Figueroa ha demostrado una capacidad de respuesta efectiva y ha sabido capitalizar el apoyo ciudadano frente a estos ataques. Su mensaje de unidad y su compromiso con la defensa de los derechos de los ciudadanos han resonado con fuerza en la población, consolidando su posición como líder indiscutible en la contienda electoral.
Este incidente ha sido un claro ejemplo de cómo la adversidad puede convertirse en una oportunidad para fortalecer una candidatura. La determinación y la firmeza de José Luis Figueroa han sido reconocidas por la población, que valora su integridad y su capacidad para enfrentar los desafíos con determinación y serenidad.